
Me recordé del Bagavad Gita, que complementa lo que decía en el capítulo anterior sobre el tema de la Muerte.
La Trimurtite indú que aparece en aquél libro, allí llamados Brahma, Vischnú y Shiva, representan los tres aspectos de la “manifestación” que se presenta delante de nuestros sentidos: creación, manutención y renovación de las “formas vivas”.
Esos tres aspectos, forman la Realidad… ¡Negar alguno de ellos es negar la Realidad!... El último aspecto, la Muerte, la extinción de la “forma pasajera” e consecuente transformación en “otras formas de vida”, es la “realidad” que normalmente pretendemos ignorar…
Es una falsedad negar la Muerte, una cobardía no encararla… ¡la “forma” acaba, pero la “esencia” por detrás de ella permanece!... La “esencia” es la “parcela de Dios” que existe dentro de nosotros… El miedo no nos deja ver, porque no tenemos el coraje de encarar la Muerte, esta con su “presencia” asustadora que oculta la realidad de lo Perenne dentro de nosotros…
Negar la muerte de lo pasajero es fuga, es apego a algo que de cualquier forma tendremos que abandonar algún día, es incapacidad de “dar el salto” que nos llevará a la Transcendencia, al encuentro con nuestra Verdadera Naturaleza…
Lo “viejo” tiene que morir para que nazca lo Nuevo, el “ego” para que nazca la Super-Consciencia, lo pasajero para que lo Eterno se manifieste en nuestras vidas. Colocarnos a disposición de lo Mayor, dejar que Él nos manipule sin oposición de nuestra parte cuando nos damos cuenta que es realmente Él quien nos empuja para ocupar la “posición” en el mundo que solo Él sabe cual interesa a Sus Finalidades, quedar tranquilos cuando Él no pide para “salir de escena” en este Su Palco del Mundo y no nos queda más “papel” a representar en Su Obra, esa es nuestra función verdadera a desempeñar en este mundo, en vez de quedar corriendo atrás de la realización de los mil sueños que asaltan nuestras mentes egocéntricas y manipuladoras…
Alto Paraíso – 10 / IV / 1999.
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